Bueno, yo no estoy pasando mi mejor momento Laia, finalmente tanto hacer como que no pasa nada a vista del mundo, pasó factura, reventó, explotó, se me partió el corazón de tan lleno de sentimientos que lo tenía.
Mientras temblaba llena de cables, tumbada en esa camilla, mimada por los médicos, pensé en que se iba a convertir mi vida ahora, si tenía sentido, si me apetecía vivirla... Es mi piel, es mi rostro, pero no soy yo, reniego de la casa donde tan feliz he sido, solo poner un pie en ella me altera de nuevo, veo pasar mi propia vida como un espectador y veo con cariño a Juan a mi lado, preocupado a todas horas por mi, escuchándome como hacia mucho tiempo no lo hacía, entendiendo al fin... y me hace tan feliz, es un rayito de sol en este agujero frío y oscuro en el que aún no dislumbró ninguna salida.
De nuevo tengo que escapar, salir de esta casa que ha sido mi guarida y en la que ahora no quiero estar, el césped de muere, este año no hay petunias olorosas que alegran el alma, tan solo macetas desnudas, no hay huerto, no estas tú.
Escapó, tal vez por última vez, escapo intentando amarrar algo sin poseer ninguna cuerda que me ayude, aqui ha acabado algo muy grande y hermoso, no se si lo que queda me apetece vivirlo.
Miro a mi hija, mi tesoro más preciado, que pensará, sentirá a esta persona tan vulnerable como su madre de siempre? podré serlo de nuevo?
Ahora, ahora no quiero pensar, intento bloquear mi mente, para que no me haga daño el mundo, el mundo... se ha vuelto gris... No se que pasará y este no saber, me altera, a mi me gusta tener todo superplanificado y esto se sale de mi control... QUE HARE????
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